La mariposa más bella del mundo, Graellsia isabelae
La Graellsia isabelae o Saturnia isabelae, como la bautizó su descubridor (Graells) es considerada por muchos la mariposa más bella del mundo. En realidad es una polilla, de la familia Saturniidae. Antes de hablar sobre su biología, un poco de historia...
Fue bien descrita por Mariano de la Paz Graells, un riojano que se dedicó a la medicina, al naturalismo y a la política y que además fundó la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales. Su descubrimiento se dio en el 1848, en la localidad de Pinares Llanos (Ávila) en pleno verano. Graells llevaba 11 años buscándola ya que tenía indicios de la existencia de un satúrnido que podría hallarse en ciertas sierras de España gracias a su amigo y también hombre de ciencias, Juan Mieg. En ese año Graells descubrió su oruga, pero no fue hasta el año siguiente que descubrió a la hembra adulta de esta bella mariposa. La bautizó como Saturnia isabelae, en honor a la reina Isabel II de borbón. Desde el 1849, año en que Graells publicó el primer escrito sobre la nueva especie, empezó a publicar más trabajos a medida que ahondaba en el conocimiento de la especie. Es interesante destacar que la noticia de que una nueva especie tan exótica fuese endémica de la Península Ibérica suscitó suspicacias entre muchos científicos que criticaron duramente a Graells. Alegaban que no había descrito cual era su planta nutricia y que podría haberla traído de América para falsear su descubrimiento en España y ganar fama. Parece ser que tener un lepidóptero tan bello en un único país encendió la envidia de muchos, y la codicia por coleccionarla.
Con los coleccionistas deseosos de tener esta nueva especie en su colección empezaron a proliferar los cazadores en la Península Ibérica, algunos incluso buscaban orugas para criarla y venderla a los coleccionistas. Aunque se descubrieron ejemplares en regiones francesas hoy se piensa que se expandieron desde las zonas origen de la Península Ibérica. A pesar de que en su época los franceses reclamaban que la especie era francesa por haberse hallado en su país, intentando restar mérito a Graells.
Con respecto a la taxonomía de esta especie, ha sido muy discutido el género Graellsia, que nació después de la muerte de Graells y se creó en honor al descubridor de la mariposa. Este género ha sido muy controvertido y criticado, señalándose que la mariposa debería pertenecer al género Actias.
Ciclo de vida: es una especie monovoltina, es decir, sólo tiene una generación al año. Los adultos vuelan de Abril a Junio aunque pueden verse incluso hasta finales de Julio. Emprende su actividad al caer la noche, buscando los machos activamente a las hembras usando como guía las feromonas sexuales producidas por estas (han sido bastante estudiadas sobre todo para la monitorización de sus poblaciones). Las orugas se alimentan casi exclusivamente de hojas de pino rojo y pino laricio aunque bajo condiciones de laboratorio se ha conseguido que coman algún otro tipo de conífera. La oruga teje el capullo en el suelo del bosque, rodeándose de acículas e hibernando. Los adultos suelen vivir unos 7 días solamente. Hay un acusado dimorfismo sexual, siendo el macho un poco más grande, con las colas más largas y con las antenas bipectinadas (plumosas), lo que es importante para la detección de la hembra a través de sus feromonas a largas distancias. En la tercera foto de arriba el macho está a la izq. y la hembra a la dcha.
Este es su mapa de distribución según la Red Natura 2000. Se ha descrito la presencia de la especie en otras zonas como Valencia o algunas regiones de Málaga, Albacete, etc. También se ha descrito en algunas regiones de Francia.
Sus poblaciones estuvieron en serio peligro pero con la protección gubernamental las poblaciones se están recuperando y, aunque sigue siendo una especie protegida y vulnerable, hemos conseguido conservarla.
Como consideraciones legales, está prohibida su captura con fines coleccionistas. Recuerdo que en 2006 fue detenido un hombre que usaba jaulas con hembras de Graellsia para atraer y cazar machos. Aunque sus poblaciones estén en gran crecimiento creo que sigue estando prohibida su captura, por mi parte nunca he visto un ejemplar en persona.
Muy interesante el artículo. Me ha llamado mucho la atención lo de la protección gubernamental, me parece curioso que haya una prohibición expresa de cazar una especie concreta de mariposas.
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